Estudio en el lago...

Aquella mañana me había levantado mucho mas temprano de lo normal.
Con un libro bajo el brazo y unos cuantos pergaminos de apuntes desordenados, me había encaminado a paso lento y relajado hacia la orilla del lago que rodeaba el castillo.
La mañana no era en absoluto cálida, sino al contrario. Se podía sentir la brisa fría que anunciaba que el otoño se estaba acercando, así que oculté un poco mas mi rostro tras la bufanda que llevaba puesta.
Pronto conseguí un lugar cómodo, reconfortante y lo mas importante, aislado del frío.  Me senté bajo un pequeño sauce, justo al lado de una roca enorme que parecía un gnomo gigante y amorfo; luego coloqué el libro sobre mis piernas y lanzando un suspiro profundo, me dispuse a estudiar.

Tras varios minutos mi estómago comenzó a reclamar el desayuno que no había tomado, así que decidí que era hora de dar un descanso. Cerré el libro sobre mis piernas y saqué de mi túnica la última rana de chocolate que me quedaba. Estaba por dar el primer mordisco cuando unos pasos que parecían acercarse llamaron mi atención y me hicieron contener la respiración para escuchar mejor. 
Por un momento solo el sonido de las minúsculas olas del lago, chocando en la orilla, era el único sonido audible; hasta que entonces una o varias voces me hicieron sobresaltar...no había duda, alguien se acercaba.

-camino con paso firme hasta llegar a ese lugar donde se ve la parte de una tunica salir del arbol, saco mi varita y al ver la rana la hechizo haciendola saltar por todos lados hasta caer en el agua, me suelto riendo- 
JAJAJAJA ups? Era escapista! 
-levanto los hombros y guardo la varita aun riendo distraida- 
Que haces aqui? Y con un libro!! Es un dia muy lindo, debi hacer saltar el libro al agua, no a la rana Zory.... 
- veo el color de tu tunica y suspiro- 
Ravenclaw otra vez? Volviste a tu esencia nerd?

Había estado tremendamente agobiada los últimos días, por lo que ese día opté por darme un descanso, ¿hace cuanto que no paseaba por los lindos terrenos de Hogwarts? Así que me dispuse a ello, no sin asegurarme de ponerme mi bufanda debido a la brisa que se sentía.

Caminé tranquilamente hasta que alcancé a ver una silueta familiar cerca del lago... -Hey, ¡Saku! -exclamé mientras caminaba hacia donde se encontraba, justo en ese momento noté que no estaba sola -¡Zory! Pero qué gusto... -observé a ambas chicas antes de notar el color de la bufanda de quien estaba sentada -Oh Zory, ¿te perdimos de nuevo?